Los ediles del Partido por la Justicia Social (PJS) cuestionaron la reelección de Fernando Juri como presidente del Concejo Deliberante de la capital. Además, apuntaron al "acuerdo entre Fuerza Republicana (FR) y el manzurismo", lo que permitió mantener a las autoridades del cuerpo legislativo: la concejala Sara Assán volvió a jurar como vicepresidenta primera y el bussista Eduardo Verón Guerra como vicepresidente segundo.
“Faltó que el doctor (vocal de la Corte Suprema, Daniel) Leiva venga a votar”, se burló Rodolfo Ávila, afuera de la reunión legislativa, con referencia a la denuncia del camarista Enrique Pedicone por tráfico de influencia. “Juri es un presidente sin legitimidad. Debió haber sido votado por los 18 concejales. Fuerza Republicana es funcional a Juan Manzur y al vicegobernador Osvaldo Jaldo”, añadió en el móvil de “LA GACETA Central".
Los concejales alfaristas remarcaron que les correspondía al partido una de las vicepresidencias en el nuevo proceso. “La elección de las autoridades no se realizó en el recinto, sino en la Casa de Gobierno. Esto demuestra que hay un pacto entre el gobernador Manzur y (Ricardo) Bussi”, manifestó, a su turno, Agustín Romano Norri.